Mi nombre es Miguel Ángel, soy profesor de enseñanza secundaria de la especialidad de Organización y Gestión Comercial (Formación Profesional) desde el año 2000. Durante este tiempo, he tenido la oportunidad de conocer el sistema educativo desde diferentes puntos de vista, como profesor al principio, y ocupando puestos de diferente responsabilidad en los servicios centrales de la Consejería de Educación más tarde. Hoy en día presto mis servicios en el I.E.S. Gonzalo Torrente Ballester de Miajadas (Cáceres), al que me desplazo diariamente desde mi localidad de residencia, situada a unos 50 kilómetros de distancia.
El Gonzalo Torrente Ballester, es un centro como cualquier otro, unos 700 alumnos, con las dificultades habituales de todos los centros en cuanto a disciplina, escasez de recursos, etc. pero nada que sobresalga de manera relevante de la media.
El motivo de relatar mi experiencia por este medio, no es otro que describir lo mas detalladamente posible, todo aquello por lo que pasamos los docentes que tenemos la desgracia de ser agredidos en el desempeño de nuestro trabajo, la frustración y el abandono absoluto que sentimos por parte de la Administración Educativa, esa que debería velar por nuestro bienestar en el desempeño de nuestras funciones.
Es mi experiencia y no pretendo generalizar con ella, pero es el modo en que yo la he vivido y espero que ello sirva de ayuda a aquellos docentes que tengan la mala fortuna de pasar por algo similar. Para el resto de afortunados, espero les ayude a concienciarse de que es un problema al que estamos expuestos todos y cada uno de nosotros, yo mismo he sido de los que siempre ha pensado que este tipo de cosas sólo podían suceder a otros compañeros (con un perfil diferente al mío).
Ofreceré, en la medida en la que pueda y vaya relatando lo sucedido, diferentes consejos y recomendaciones, que quizás el día de mañana, sirvan a alguno de vosotros para actuar con cierta previsión, puesto que hay aspectos que si bien debieran estar cubiertos por el propio sistema, si no se conocen pueden llevar a algún que otro dolor de cabeza.
Hoy hace exactamente un año de aquel desafortunado incidente, de una salvaje agresión que me mantuvo alejado de mi vocación durante más de dos meses. A día de hoy, las heridas, aún abiertas, resultan mas llevaderas, pero el pésimo sistema burocrático en el que vivimos impide, y lo hará por mucho tiempo, el poder pasar página y cerrar definitivamente este capítulo de mi vida.
Sentiros libres compañeros, de comentar y opinar libremente, entre todos, este blog resultará aún más útil.
Un abrazo.
Miguel Ángel Gil
Ofreceré, en la medida en la que pueda y vaya relatando lo sucedido, diferentes consejos y recomendaciones, que quizás el día de mañana, sirvan a alguno de vosotros para actuar con cierta previsión, puesto que hay aspectos que si bien debieran estar cubiertos por el propio sistema, si no se conocen pueden llevar a algún que otro dolor de cabeza.
Hoy hace exactamente un año de aquel desafortunado incidente, de una salvaje agresión que me mantuvo alejado de mi vocación durante más de dos meses. A día de hoy, las heridas, aún abiertas, resultan mas llevaderas, pero el pésimo sistema burocrático en el que vivimos impide, y lo hará por mucho tiempo, el poder pasar página y cerrar definitivamente este capítulo de mi vida.
Sentiros libres compañeros, de comentar y opinar libremente, entre todos, este blog resultará aún más útil.
Un abrazo.
Miguel Ángel Gil